Chipilo es un pueblo único perdido a 15 minutos de la ciudad de Puebla. Es una comunidad de menos de 5 mil habitantes que no hablan ni español ni náhuatl. Su idioma es un dialecto del noreste de Italia, el véneto, un legado de sus antepasados migrantes que cruzaron el Atlántico a finales del siglo XIX.
Aunque sus habitantes conservan su lenguaje, conocido como chipileño o véneto chipileño, se sienten orgullosamente muy mexicanos. Su origen en tierra azteca se remonta a 1880, cuando el Río Pave arrasó con la región del Véneto en Italia. Muchas familias lo perdieron todo. Justo por aquel entonces, el gobierno del entonces presidente Porfirio Díaz lanzó un programa para atraer a agricultores del Mediterráneo al país. La condición era que modernizaran el campo mexicano y pagaran por sus nuevas tierras en un lapso de 10 años.
Ante esta oportunidad, 38 familias provenientes de Segusino cruzaron el Atlántico rumbo a la tierra prometida. Fue así que el 2 de octubre de 1882 fundaron el pueblo mexicano más italiano de todos: Chipilo. Los recién llegados se dedicaron a la agricultura y la ganadería, pero se especializaron en la producción de lácteos, una tradición que todavía se conserva.
Qué hacer en Chipilo
Además de sus arraigadas tradiciones italianas y sus deliciosos quesos, Chipilo también es un pueblo único por su estilo. A diferencia de otros pueblos en México, aquí no hay ninguna plaza principal. Lo que sí podemos encontrar es una iglesia, muy distinta a otras que hay en Puebla de estilo barroco o churrigueresco. Más bien, esta parroquia dedicada a la Inmaculada Concepción es sencilla, similar a las de la región norte de Italia.
Otro atractivo de Chipilo es el Cerro de Grappa, donde se erigió una escultural del Sagrado Corazón de Jesús, así como otra de la Virgen del Rosario. Además, hay una roca que rinde homenaje a los italianos caídos durante la Primera Guerra Mundial.
Chipilo también ofrece a sus habitantes varias tiendas de embutidos con los mejores productos, elaborados de manera artesanal. También es común encontrar restaurantes con deliciosos platillos elaborados con productos caseros de la gastronomía chipileña. Chipilo es un rincón de Italia perdido en México, donde los productos lácteos no tienen comparación, que tienes que conocer.
