«A Puebla y al país le hace falta justicia, democracia»
Platícanos un poco de ti, ¿cuál fue tu formación?
Yo estudié prácticamente toda mi vida con los jesuitas hasta la preparatoria. Después, por influencias familiares, estuve estudiando en México administración de hoteles, pero no me gustó y me vine a la Universidad de la Américas, conseguí una beca y estudié filosofía pero nunca terminé.
¿Cómo empezaste tu carrera en los medios?
Fue pura casualidad. Después de la huelga de las Américas, yo salí expulsado por revoltoso, perdimos la huelga, estuve un tiempo en México, me fui a vivir a Europa, y luego regresé, y cuando regresé vivía todavía con mi mamá y me dijo que me habían marcado por teléfono, me dio el número, llamé y el señor me dijo que me quería ofrecer un trabajo y el señor era Toño Grajales de radio oro, me quedé ahí, me enamoró el radio, escribía “El hombre y su obra”, corregía la redacción de las notas, luego estuve en la agencia de producción.
¿Qué te motiva a trabajar en esto?
Yo estoy enamorado de la radio y de la gente; y pensar que con mi oficio puedo dar información pero también puedo compartir libros, lectura, música… me mantiene vivo todo el tiempo.
¿Alguien que te haya inspirado dentro de esta profesión?
Mis inspiraciones vienen de la literatura y de la música. Tengo tres amigos a los que quiero mucho, y me gusta mucho cómo comunican, aunque sea en otro renglón; uno es Serrat, otro es Sabina y Eduardo Aute, siempre los admiré pero afortunadamente la vida al ir corriendo, nos convirtió en amigos y los admiro por coherentes, porque no se doblan, por que tienen una postura, creen en ella y se respetan a sí mismos.
¿Cuál es tu compromiso social?
Básicamente dar información y no solamente leer notas, sino pensar junto con el auditorio el país que tenemos, lo injusto que es, la clase política que sigue derrochando el dinero frente a cincuenta y tantos millones de pobres. Somos un país de privilegios, canonjías, ni siquiera se premia tanto el esfuerzo personal, se premia mucho más las relaciones, los compadrazgos y en fin, el que no tiene poder, no tiene dinero. Aspiro a ser un grano de arena que contribuya a que este país sea de otra manera.
¿Tienes algún reto u obstáculo dentro de los medios?
Mantener los equilibrios, hacer a un lado fobias personales y poder entrevistar igualmente a una persona que me caiga mal, que a una persona que me caiga bien, soportar la presión particularmente del que gobierna, el que gobierna siempre quiere que hables bien de él, igualmente mantenerse sensato y libre, mantener independencia y crítica.
¿Qué le hace falta a Puebla para llegar a ser lo que tiene que ser?
A Puebla y al país le hace falta justicia, democracia, que repartamos mejor lo que tenemos, en términos económicos y políticos, que haya más participación de la gente en la riqueza nacional y mayor participación en las decisiones.
Si te tatuaras una frase, ¿cuál sería?
“Que el diccionario detenga las balas”.
