En la Sierra Norte de Puebla existen maravillas naturales impresionantes, pero también hay otras creadas por el hombre. Una de estas obras asombrosas es la Presa Necaxa, la más grande del estado. Desde los días del Porfiriato maravilla a propios y extraños en el municipio de Juan Galindo.
La Presa Necaxa se construyó sobre la antigua comunidad de Necaxa. Se inauguró en 1905 y por aquel entonces era el complejo hidroeléctrico más poderoso de México. Quien se encargó de esta magna obra fue el reconocido ingeniero estadounidense Frederick Stark Pearson.
El Sistema Hidroeléctrico de Necaxa se basó en la explotación de los ríos Necaxa, Tenango, Xaltepuxtla y sus afluentes, incluyendo sus grandes caídas de agua. Esta fue la primera presa para generación eléctrica del país y cuando se inauguró era la planta más moderna del mundo.
Actualmente, los visitantes de la Presa Necaxa solo pueden observar la cortina y algunas tuberías que daban impulso a las turbinas. Asimismo, desde un mirador ubicado a 2 kilómetros se puede ver la garganta y en el fondo la casa de máquinas.
Los alrededores de la presa son un buen lugar para caminar y relajarse al aire libre. A la par de la visita a la Presa Necaxa es recomendable dar una vuelta por la comunidad de Tenango de Flores, localidad famosa por sus flores y cafetales. Se encuentra solo a kilómetro y medio de la presa. Además, el lugar es escenario de exposiciones y ferias en las que se pueden encontrar azaleas, dalias, violetas y más.
Cerca de la presa se pueden dar largas caminatas mientras se admiran las bellezas naturales de la zona. También se puede practicar pesca deportiva. La zona oriental de la presa es reconocida por sus carpas y mojarras.
Foto principal propiedad de in-dErick
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