En las entrañas de la ciudad de Puebla, justo en los linderos de la colonia Los Volcanes y el barrio de Santiago, existe un rincón arbolado con unas guardianas muy peculiares. Son cinco bellas féminas que bailan y entonan cánticos hipnóticos para los soñadores. Sí, este lugar está en la Angelópolis y se llama Parque de las Ninfas.
La historia de este punto de reunión para los poblanos se remonta hasta los años sesenta, cuando en esta zona existió una enorme escuela llamada Aquiles Serdán. Tristemente, esa escuela se derrumbó por la necesidad de movilidad en la ciudad y su campo beisbolero terminó por convertirse en un parque público.
A principios de la década de los noventa se eligió llamar a este nuevo espacio “El Parque de las Ninfas”. Para ello, se instalaron en su parte central cinco bellas esculturas femeninas que representan a las famosas figuras de la mitología griega. Los relatos dicen que las ninfas son hijas de Zeus y pertenecen a los órdenes de la naturaleza: el mar, la tierra, los árboles, el bosque y la pradera.
Parque de las Ninfas, punto de encuentro y esparcimiento
Hoy en día, el Parque de las Ninfas es un punto de encuentro y esparcimiento que enmarca grandes recuerdos. Hogar de aves e insectos, en un hábitat que no restringe el paso a las parejas de enamorados y a las familias enteras que platican, juegan y conviven en armonía.
A su alrededor hay estructuras piramidales que permiten subir y bajar en medio de los árboles, entre caminos que por momento parecen laberintos. En el centro, una fuente sostiene de pie a una de las maravillosas ninfas.
Si en algún momento deseas buscar relajamiento y tranquilidad, dirígete a este parque que se ubica en la 17 Sur, entre la 23 y la 25 Poniente. Aprovecha este bosque urbano y disfruta de un paseo hipnótico entre bellas damas de bronce.
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