Tal vez no lo sabías, pero antes de 1917 las calles de la ciudad de Puebla tenían nombres. En la época colonia, estos nombres casi siempre hacían alusión a algún evento o personaje local, más tarde se usaron nombres de próceres de la historia nacional. Sin embargo, después del año ya mencionado, para bien o para mal, comenzaron a usarse números para nombrar a las calles del centro de Puebla.
La nomenclatura del centro de Puebla es peculiar. Los números nones y los pares juegan con los cuatro puntos cardinales en un sistema que puede confundir a algunos, ya sean visitantes o nativos. Esta idea de numeración progresiva surgió de Guillermo Acho, regidor de Puebla a principios de la década de 1880. Aunque la idea se materializó hasta 1917, cuando el presidente municipal era Manuel B. Montes de Oca.
El proyecto se implementó con la idea de dotar al centro de Puebla con un sistema de orientación “fácil de usar”, aprovechando las coordenadas cardinales de la traza original. Esta idea de enumerar calles ya se había usado antes en ciudades como Washington y Manhattan, en Estados Unidos. En México tenemos el ejemplo de Mérida. En Sudamérica, está Medellín, en Colombia.
¿Cómo están enumeradas las calles del centro de Puebla?
Actualmente, la cuadrícula de las calles del centro de Puebla parte de dos ejes perpendiculares. Estos ejes se llaman Avenida 5 de Mayo y Avenida 16 de Septiembre (norte-sur) y Avenida Juan de Palafox y Mendoza y Avenida Reforma (oriente-poniente). A partir de aquí, las acalles se enumeran con una lógica secuencial solo con nones o solo con pares. Hacia norte y oriente son nones, mientras que hacia el sur y poniente las calles son números pares.
La verdad es que esta numeración puede resultar difícil de entender a la primera, sobre todo para los turistas. Se requiere de mucha práctica para usarlo de manera eficiente cuando te mueves por el centro de Puebla.